MIMO

MIMO, es una herramienta que pretende fungir como un apoyo didáctico en terapias conductuales y de lenguaje con el objetivo de lograr la identificación de las 5 emociones básicas: alegría, tristeza, enojo, angustia y miedo.

Sobre MIMO

MIMO es una herramienta para terapias conductuales y de lenguaje que busca identificar 5 emociones básicas en personas subclínicas: alegría, tristeza, enojo, angustia y miedo. Por otro lado, para personas de grado I y II, funcionará como medio de comunicación y control en crisis al utilizar el peluche como expresión emocional.

Mision

Facilitar el desarrollo social y mejorar el bienestar de niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) proporcionando herramientas innovadoras y accesibles, como peluches inteligentes, que promuevan la comunicación de sus emociones y necesidades, fortaleciendo así su integración en la sociedad.

Vision

Convertirnos en líderes reconocidos a nivel mundial en el desarrollo y producción de peluches tecnológicos diseñados específicamente para personas con autismo, siendo una empresa pionera en la creación de soluciones inclusivas y empáticas que mejoren significativamente la calidad de vida de quienes viven con TEA. Buscamos establecer alianzas estratégicas con expertos en el campo del autismo, centros de investigación y comunidades afectadas, para seguir innovando y expandiendo nuestro impacto positivo en la vida de las personas con autismo en todo el mundo.

Objetivo

Brindar a los niños con TEA una herramienta de apoyo integral en forma de peluche inteligente que facilite la comunicación de sus emociones y necesidades al resto de personas, fomentando su desarrollo social y mejorando su bienestar.

Ventajas

  1. Facilita la comunicación: El peluche tecnológico proporciona una forma visual y tangible de expresar emociones y necesidades, lo que puede ser especialmente útil para aquellos con dificultades en la comunicación verbal.
  2. Apoyo emocional: El peluche puede servir como un compañero reconfortante que ayuda a calmar la ansiedad y proporciona consuelo en momentos de estrés, ayudando así a regular las emociones.
  3. Fomenta la interacción social: Al permitir que la persona con autismo practique habilidades sociales con el peluche, como turnarse para hablar o expresar empatía, se promueve el desarrollo de habilidades sociales importantes.
  4. Personalización: Los peluches pueden adaptarse a las preferencias individuales de cada persona, desde el diseño hasta las funciones específicas que mejor se ajusten a sus necesidades y gustos.
  5. Estímulo sensorial controlado: Algunos peluches pueden incluir características sensoriales específicas, como luces suaves o música calmante, que pueden ayudar a modular la respuesta sensorial de la persona con autismo en entornos sobreestimulantes.